martes, 5 de febrero de 2008

Dieta para el Vegetariano de la Ciudad

Para evitar las complicaciones de una combinación inadecuada de alimentos durante el nivel primario de la transición a la dieta vegetariana, es mejor evitar todos los dulcificantes.

Esto provocará un beneficio posterior de unas reacciones de limpieza más moderadas. Sed ligeros en granos -mejor son los vegetales con fécula cocinados- come poco de todas las semillas. Un toque con vegetales marinos o fermentados, granos y legumbres sazonadas durante años (mijo, tamari), te proporcionarán un gusto salado.

Durante la transición puedes tener períodos de ansia de alimentos naturales específicos saludables (no necesariamente óptimos), queso, aguacate, huevos, ajo, pescado, por ejemplo. Usalos o sus equivalentes preparándolos en la forma más pura posible. Las ansias indican generalmente una necesidad dietética. Estos deseos desaparecerán cuando mejore la salud. Usa muchos zumos y germinados. Nunca comas más de lo suficiente.


DIETA DIARIA



Desayuno: Verduras y zumo de fruta, o fruta seca en remojo, o frutal fresca de la estación.

Comida: Verdura o zumo de hierba 20 minutos antes de la comida, ensalada completa de germinados, 1 ó 2 tazas. Si masticar, es un problema, machaca la ensalada. Sírvela con sésamo remojado y semillas de girasol o 1/4 de taza de sésamo o pipas y yogurt. Lo mejor es una ensalada sencilla de germinados o con un poco de aceite de oliva y algas.

Cena: Zumo veinte minutos antes de la comida. Ensalada de germinados con aceite de oliva (opcional), algas y otros vegetales (verduras) compatibles. Patata en olla exprés o patata cocida, ñame, crema de nueces macerada, chirimía u otros tubérculos una taza o menos.

Piscolabis de noche: Apio, o zumo de hierba o té de hierbas.

Los vegetarianos crudívoros que son adictos a los alimentos altamente concentrados -semillas, frutos secos, olivas, aguacate- no viven mucho más que los comedores de carne. Es mucho mejor reemplazar tales alimentos con alimentos cocinados bajos en proteína, especialmente en las condiciones invernales de la ciudad, manteniendo, al menos un 80% de dieta crudívora. Los tubérculos cuando se cuecen o cocinan en una olla de acero, satisfarán el deseo de alimentos pesados. Son mucho menos pesados para los órganos digestivos y eliminativos que los alimentos elevados en proteína y la grasa.

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