sábado, 2 de febrero de 2008

Las propiedades de la espinaca contra la ceguera

Una alternativa contra la degeneración macular y posterior pérdida de la visión podría ser el consumo de espinaca.

Así lo aseguró el doctor Carlos Plotkin, presidente de la Sociedad Argentina de Oftalmología, quien destacó a Infobae.com que la degeneración macular es un problema “de difícil solución” por lo que ante la “prueba de diversos tratamientos, se hace hincapié en la alimentación y en cómo podría influir”.

“La degeneración macular es un proceso relacionado con la edad, que se desarrolla a partir de los 50 y suele ser progresivo”, explicó el médico a Infobae.com y destacó que “puede tener más evolución en un ojo que en otro y hasta llevar a la pérdida de la visión”.

Si bien Plotkin aseguró que “todavía no está probado”, destacó que “el epitelio de la retina se vería beneficiado con la presencia de luteína (sustancia química que ayuda a formar un pigmento clave protector del ojo y que también se encuentra en el maíz, la col y el brócoli)”.

Así las cosas, parecería que la espinaca tendría otras propiedades que se sumarían a de “hacernos fuertes como Popeye”, bromeó el profesional.

La investigación (acerca de la influencia de los alimentos en esta enfermedad) es llevada a cabo por investigadores de la Universidad de Manchester, en Inglaterra, donde creen que el consumo de este vegetal podría proteger a los ojos de la degeneración macular senil (DMS).

“La degeneración macular senil es una de las causas más frecuentes de pérdida de visión en las personas mayores”, informó Plotkin, quien asimiló la enfermedad con “la pérdida de pelo, propia de la quinta década de vida”.

Se cree que la enfermedad -causada por la degeneración del área de la retina responsable de ver detalles y colores en el campo central de visión- afecta hasta 12% de hombres y 29% de mujeres de más de 75 años.

Si bien –tal como explicó Plotkin- hasta ahora no se sabe porqué algunas personas son susceptibles a ese trastorno y otras no, lo que sí se sabe es que la DMS está relacionada al tabaquismo, la obesidad y la dieta pobre.

El equipo que trabaja en Manchester cree que junto con otro compuesto llamado zeaxantina, la luteína forma una sustancia grasosa amarilla llamada pigmento macular que se cree protege a la mácula de la enfermedad.

Guiados por el doctor Ian Murria, tratarán de identificar si la discapacidad visual prematura está relacionada a los bajos niveles de pigmento macular y si “consumir vegetales ricos en estas sustancias tendrán un impacto directo en la enfermedad”.

El presidente de la Sociedad Argentina de Oftalmología destacó que actualmente los tratamientos contra la DMS son desde quirúrgicos, con rayos láser, hasta la inyección de medicamentos directamente en el ojo.

Y que dado que “hasta ahora no se logró un tratamiento efectivo que mejore la agudeza visual, todo es válido”.

0 comentarios:

Design konnio.com